Amanecerá y Veremos

Venezuela parece jalonada a la vez por varias tendencias que creen ser la mejor opción para su pueblo. Todo está muy enredado porque no son propuestas sencillas, claras, ni transparentes. Entre las varias opciones hay por lo menos dos más fuertes y en estas dos existen múltiples variaciones.

Por un lado está el oficialismo, que puede ser, al menos en aparente división, chavista  radical,  chavista ligth o madurista, etc.,  y por el otro está la oposición que a su vez, también en una aparente división, puede ser radical, moderado, un renegado-salta talanquera, etc.,  aunque en tales divisiones existen aun mas subdivisiones dependiendo de su inclinación a la izquierda, a la derecha, a lo demócrata o a lo autoritario, etc., a la que debemos sumar a los llamados ni- ni,  con tendencia a jugar, en términos generales, tanto en el oficialismo como en la oposición, dependiendo del análisis o visión que tengan de cada situación..Y en fin, que  si continuamos revisando podríamos terminar en una madeja, aun mas compleja e infinita.

Sin embargo en el actual ambiente, debido a la pronta cita electoral,  dos opciones son claramente posibles, e incluye tanto a chavistas, ni-nis, como opositores, y sobre todo a estos últimos: votar o abstenerse de hacerlo, o en términos mas llanos, votar o no votar,  he allí el dilema. Todo esto  me puso  a pensar en el Rey Salomón y su famosa salida, cuando tomó aquella justa decisión.

Les recuerdo, dos mujeres vivían en la misma casa,  casualmente parieron a la misma vez y  también a la misma vez amamantan a su críos, pero  el hijo de una de ellas muere, por lo que decide durante la noche, mientras la otra, y su hijo vivo duermen, intercambiar los niños, dejándole  el muerto y quedándose ella con el vivo. Cuando se presentan ante el Rey Salomón, acusándose una a la otra por el nefasto cambio, el jerarca  al ver que ninguna de las dos mujeres abandonaba su posición y que parecía que ambas decían la verdad,  investido de sabiduría, pide una espada y ofrece picar al niño en dos para que cada una se quedara con una parte, en igualdad de condiciones. Claro está que rápidamente,  la verdadera madre, cediendo su derecho a la maternidad, impide tal atrocidad y le da el título de madre del niño vivo, a la otra. 

Por supuesto que el Rey no quería cometer el crimen que anunció y más bien solo quería extraer la verdad de los hechos, poniéndolos en tal extremo  irrefutable, que solo la verdadera madre estaría dispuesta a salvar a su hijo por puro amor. El sabía que la verdadera preferiría que su hijo se quedase con una madre impostora a verlo muerto, mientras que la otra se mantendría intransigente, segura de que no podría revivir al suyo, y que le importaría poco el dolor que causara si con eso podría aliviar su propio dolor.

En la situación actual también parece que dos partes, dentro de la oposición: Los abstencionista por un lado  y los pro-voto, por el otro, jalan al país de un extremo al otro. Sin embargo ambas están heridas, ambas partes muestran sus pérdidas y desean la reposición de lo imposible, desean la resurrección. Ambas partes desean cambios, pero cada una por vías distintas.

Así las cosas es perentorio preguntarse ¿ Cual de las dos trata de engañar al Rey, es decir al Pueblo? ¿Cual de las dos tiene la razón? ¿Cuál de las dos es la verdadera madre del sobreviviente?, pero sobre todo, siendo Venezuela este niño ¿Cuál de las dos, por amor, prefiere ver a su hijo con una madre impostora que a su hijo muerto?.... Hermanos venezolanos, el 21 de mayo....Amanecerá y veremos!

Willmary Comus

Una más en la madeja...