Lo que no te dije

El 21 de mayo ha sido  designado por muchos, entre los que me incluyo, como el día en el que veríamos resultados de acciones desencadenantes luego de la elección presidencial adelantada. No se refiere, sin embargo, al día de 24 horas que finaliza a las 12 de la noche, sino a lo que haremos, de ahora en adelante luego de la decisión que tomamos el 20 de mayo y  de los resultados que de ella obtuvimos.

A partir de este día, e incluso antes, pues los resultados se dieron entre las 10 y 11:00 pm, muchos comenzarían a decir: " Viste, Te lo dije",  "Yo sabía que esto iba a pasar", Viste?" que pasaría lo mismo de siempre?". Dirán esto desde su dolor, ese que produce la pérdida, ese dolor que sienten porque no terminan de ganarle una a su contrario, porque el nefasto ventajismo oficial no lo permite...pero eso ya lo sabíamos. Sabíamos que sin importar nuestra posición, ni el empeño que le hayamos puesto, en cualquier momento de este día íbamos a escuchar del que piensa distinto la temida frase: "Viste, te lo dije". Y es que parece que nos gusta más el papel de adivino, brujo o pitonisa, que el de ciudadano responsable de sus acciones.  Parece que nos importa más tener la razón, adivinando sobre los acontecimientos futuros, que sentarnos a reflexionar, meditar, discernir el siguiente paso, pasar por el dolor si es necesario y admitir luego que estuvimos en lo cierto o que nos equivocamos.

Yo sin embargo, aún tengo esperanzas y aunque aposté a tu cordura, hoy debo admitir que hubo muchas cosas que no te dije.

No te dije hermano, que somos iguales, que estamos en este mismo barco y que pase lo que pase, seguiremos unidos por el vínculo del suelo y de la sangre. No te dije que me duele tu dolor, ese que te hizo tomar la decisión que tomaste, que entiendo que como yo, te sientes impotente ante tantos abusos, que como yo te has equivocado, que tienes como yo un duelo por los que han muerto por la violencia, por su enfermedad incurable, o por su enfermedad curable pero sin medicinas o por desnutrición.  No te dije que no hay salida posible que no pase por el perdón,  No te dije que he escrito y te he hablado mucho del perdón,  de un perdón unilateral, en el que te exijo que perdones  tú pero que yo misma debo empezar por perdonarte.

Hermano  no te dije que no he intentado lo suficiente para entenderte, no te dije que solo entre nosotros es posible...y  que te necesito para reconstruir

Willmary Comus

Pecadora, perdonada, llamada, enviada...que te pide perdón!